HUMOR: EL ROBO EN ESPAÑA

Por Anónimo

Un poco de Humor siempre es bueno para la salud física y mental, máxime en la situación actual así que hoy cuelgo esta anécdota leída en Internet. Espero os guste.

Cómo denunciar un robo en ESPAÑA

Yo tengo un sueño LIGERO y una noche  noté que había alguien rondando por el jardín de mi casa.

Me levanté silenciosamente y me quedé escuchando leves ruidos que venían de fuera, hasta que ví una silueta a través de la ventana del baño.

Como mi casa es muy segura, con protecciones en las ventanas, cierres internos en las puertas, perro asesino, una reja parecida a la que tiene la jaula de los leones en el zoológico (con fierros y puntiagudos alambres de púas), no me preocupé demasiado, pero estaba claro que no iba a dejar al ladrón ahí contemplándolo tranquilamente.

Llamé a la policía e informé la situación dando mi nombre y dirección. Me preguntaron si el ladrón estaba armado; de qué calibre era el arma; si estaba solo o acompañado o si ya estaba dentro de la casa.

Aclaré que no sabía y me dijeron que no había ninguna patrulla cerca para ayudar, pero que iban a mandar a alguien en el momento que fuera posible. Que si pasaba algo que volviera a llamar....

Un minuto después llamé nuevamente y dije con voz calmada: ¡Oiga! hace un rato llamé porque había alguien en mi jardín, ya no hay necesidad de que se den prisa, no corro ningún peligro porque el tipo que intentaba entrar en mi casa está ya con los sesos esparcidos por el jardín al haberle volado la tapa de los sesos de un tiro de escopeta calibre 12 que tengo guardada para estas situaciones.

Pasados menos de tres minutos rodeaban mi calle:

1. Cinco patrullas de la policía,
2. Doce agentes de los Geos
3. Un helicóptero,
4. Dos unidades de Bomberos,
5. El Defensor del Pueblo,
6. La asociación de Derechos Civiles,
7. Dos ambulancias,
8. Un equipo de reporteros de TV con fotógrafos de la Primera, Segunda Tercera la Cuarta y Las Últimas Noticias,
9. Un fiscal del Ministerio Público,
10. Un diputado,
11. Dos concejales
12. Un grupo de la asociación de derechos humanos

       

Cincuenta perros-flautas reclamando los derechos del ladrón.

El ladrón miraba todo con cara de asombro y por el gran despliegue de fuerzas debió de haber pensado que era la casa de algún personaje político de gran influencia.

En medio del tumulto, un teniente se aproximó y me dijo:"Creí que había dicho que había matado al ladrón"

Yo le contesté "Creí que me habían dicho que no había nadie disponible..."

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